De los 5 hijos que tuvo el señor de la Ira, Manfredo era el menor, a cada hijo el señor de la ira les fue dando un lugar para refugiarse, unas tierras, un rincón donde hacer suyo el mundo, a Demótes le dio unos lagos al sur de la nueva Escocia, era un lugar frío pero agradable e, en el cual Demótes corpulento y hosco reinició su vida perdiéndose en el bosque todas las mañanas y regresando por la noche a dormir, Demótes perdió la conciencia del tiempo y poco a poco fue quedándose en el bosque hasta que nunca volvió. A Felóstites el señor de la Ira le dio un lugar cerca de los lago, al oriente, pero este lugar es tan, pero tan lejos que no pudo recordar el camino de vuelta y termino sin volver. Finalmente a Isístines le regaló toda Europa, pero le pidió que volviera cada mañana, Isístines era guerrera y pudo obedecer a su padre unos días, sin embargo, escuchó que mas al norte los habitantes de las nieves conocían otros lugares pasando el océano, y buscó esas aldeas, la gente de las nieves emprendió una guerra hacia el otro lado del mar y en una batalla Isístines la bella guerrera murió decapitada.
El señor de la Ira pensó en que era prudente no dejar a Manfredo y Jofílides lejos de su protección, Jofílides era inteligente pero poco sociable, gustaba de pasar todos los días intentando crear pequeñas maquinas que hicieran las labores de la casa y el campo, inventó una maquina que permitía recoger los pámpanos de la vid y otra que hacía vino, otra que lo probaba y una más que lo envasaba inventó una maquina que jugaba con los niños y otra que los dormía.
Manfredo jugaba idioteces, buscaba nidos de animalejos en las zarzamoras, comía con la boca abierta y nunca iba a la iglesia, comía mucho y perdía el tiempo tocando el tambor y creando canciones; entonces el Señor de la Ira pensó que si el moría alguno de ellos sería dueño de esas tierras, pero ¿Cuál? Jofílides quizás inventaría una maquina que gobernara por el, y seguiría inventando , y Manfredo tal vez nunca tomaría enserio el cargo… Difícil decisión. Luego de muchos días el Señor de la Ira no pudo dormir y nunca tuvo una respuesta, así que enfermó, supongo que por que en esos tiempos la gente muere de algo, el Señor de la Ira murió, Jofílides se retiró en una maquina que el mismo creó, Manfredo tuvo que asumir todos los cargos que un hombre de guerra y gobernante debe asumir, y vivió con la conciencia apesadumbrada, cargada de muertes que quedaron en sus manos, malas decisiones momentos buenos y malos, así también muchos excesos los excesos de un rey joven e inexperto, por ejemplo si a Manfredo le gustaba una mujer del pueblo la tomaba, pero si esta mujer tenía marido, mandaba al marido a la guerra al frente, y lo enterraba con honores mientras consolaba a la mujer, en su lecho hubo muchas muchas mujeres, porque Manfredo aprendió el exquisito arte de la seducción, que es un arte antiguo así como la espada…
Vivió Manfredo muchos días hasta que fue viejo y en su vejez, y en la torpeza de sus actos y la grandeza de su reino, ahí en su mismo lecho su mente se abrió justo antes de que la muerte se lo llevara, y supo que entre todas las cosas, más allá de todas las riquezas un hombre, el que de verdad es hombre, antes de ser rico, o ser pobre, un verdadero hombre sabe tocar por que es músico, y es valiente, es vigoroso, no tiene miedo nunca porque es hombre de guerra, pero es prudente en sus palabras y es hermoso. Supongo que Manfredo entendió que un hombre de verdad tiene a Dios de su lado.
Y así fue que Manfredo aprendió de la vida hasta que encontró la muerte, y de toda la casa de su padre el Señor de la Ira, no queda nadie porque estaban destinados a la destrucción.