Este, creo que es uno de los textos mas honestos que voy a escribir, lo digo porque mi yo biográfico esta muy conectado con mi yo literario, y entre esa falta de ganas de escribir, y los sucesos aquejando mi vida, ya tengo nueva fuerza para otro escrito, aunque me reuse a escribir. Siempre debo advertir que, son verdaderos los sucesos en un escrito, porque quien los crea, los hace coincidir con su historia, pero son falsos, porque son parte de un motor de creación que ilumina una parte de la imagen mental y desilumina muchas otras, con lo cual distorsiona la realidad, y la reintegra en una nueva interpretación. No me gusta la palabra ánimo, y me disgusta más que me la digan... no sé, es alguna de mis múltiples manías, pero creo que es por que la encuentro vacía, no puedo ser animado a reaccionar, no puedo ser animado porque mi parsimonia es constante y con una finalidad, y no puedo animar a nadie, porque necesito decirle mas palabras; no se trata de tomarse una pastilla y estar animado instantáneamente, se trata de un esfuerzo a reaccionar.
Hoy la desilusión está sentada aquí, junto a mi, la veo y pienso en el tiempo en el que no me acompañaba en mi soledad, nada mas que la muerte, pero ahora, la desilusión esta fija, viéndome, pesada, apesadumbrada, con esa maldita sonrisa,tonta y la boca embadurnada de lápiz labial, después del desagradable besuqueo de anoche; ¿por qué tenía que darme cuenta de como se aprovechó?, ¿por qué me utiliza?, maldita desilusión, maldita, me usaste, me acariciaste tantas veces, que volví a soñar contigo, estúpida desilusión, hicimos el amor, y me sentí pleno, porque cuando amas algo la vida y el alma están llenos, pero no para mi, te maldigo desilusión, y maldigo tus pies perfectos, los que tanto amé, te maldigo desilusión, y pienso en ti con tanto dolor, pero me es posible levantarme, te maldigo desilusión y espero olvidarte, te maldigo desilusión, y pienso en tus manos, en tu oloroso tacto, y en el cuello de mis besos, y en como, al ir subiendo por tu espalda, encontré la luna al medio día, te maldigo, y creo que esta herida, sanada con alcohol la noche de anoche tiene que cerrar, mil fiestas, y otras mil desilusiónes pasaran por mi cama, por mi boca, por mi; pero tú, maldita desilusión, infeliz y mal nacida desilusión, espero que te rompas el cuello al bajar de tu orgullo, que todo lo malo te arrastre al infierno, a donde tu podrido corazón pertenece, tú desilusión... sufre y llora sangre, maldita y malditas tus flores, esas, las que envié a tu tumba.
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