Cuando te enamoras, siempre piensas que la vida te dará al final, esa conclusión perfecta, ese final feliz con el que el para siempre se hace eterno. En mis historias, eso, la eternidad o lo que signifique, que yo (ya no sé que es, pero sé que puede suceder), hago que se resuma en un amor eterno que solo duró 5 minutos. Hoy le regalo este cuento a un recuerdo, lindo como el cielo azul de la primavera, le regalo esa felicidad de encontrar abril enamorado, le regalo esto a esa linda, linda chica, ella que fue mi Valentín de algún febrero, aunque jamás estuvimos juntos, fue algo fugaz, pero tímido.
La sonrisa, esa sonrisa y sus cabellos al aire son lo más lindo que pude ver nunca, la falda de cuadritos, las calcetas hasta media pierna, y el chaleco azul. Todo ese ambiente, esas mañanas llegar a mirarla, aunque sea un poquito, un minutito más.
Subiendo por las escaleras, encontré que entrar al salón y verla sentada con la pierna cruzada, sonriendo en do menor, en una pintura de Chagal, en una historia prohibida,una historia en la que lejos y cerca son solo relativos.
Ella era lo mejor de todo el día. Las miraditas coquetas, el sentarme hasta adelante, el aroma a lápiz recién afilado, los cuadernos nuevecitos, las plumas de gel, el acabar con los dedos llenos de tinta, otra vez los recreos, lo que yo creía y que no sabía, y el encontrarme a varias horas del final de la jornada, su recado, su mensaje... Es curioso como se van llenando los días de ... nada, pero todo te lo puede dar una sonrisa y el caminar despacio de una persona, los ojos grandes el extrañar los lunes, el hola y el adiós de cada mañana. Los días volaron, como siempre los días se van volando y de pronto la fiesta de el fin de año me trajo nueva evidencia, tal vez yo te guste como tu a mi, la incertidumbre y el pensar se fueron a dormir. Y al despertar , ya era enero y la barriga llena de mariposas me hizo darle un beso lindo, con la calma preciosa que puedes tener a escondidas.
La verdad la vida es cruel, por que amas en 5 minutos y después todo se va al mismo lugar al que vamos todos a morir. Es ese amor a escondidas, tan intenso, pero tan efímero, un regalito a obscuras, y es esta vida que no nos permite amar como se debe y solo te da pruebas de lo que quisieras pero no puedes alcanzar, es ... Cruel, eso cruel.
Se hizo febrero, y el 14, sus ojitos tiernos, no he visto otros así, supuse que quería algo de alguien especial, yo no me atreví todo debía estar a escondidas, y entonces, el globo color plata brillando al sol, y todo mi amor profundo. Es curioso como después de todos estos años aún recuerdo la risa amplia, la lluvia fugada, los besos clandestinos, los labios mordidos y a ella, mi eterna amada, y el olvido, el viento el calor, la vida cruel , dejándome solo, y este tiempo de soledad y de otras edades y tiempos, solo tengo en un lugar especial, el recuerdo que vuelve a donde todo debe estar.
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