No entiendo a la bestia , ni varias cosas, la miro frente a mi. no entiendo porque estos días no siente nada, me he reforzado entre los tiempos y gracias vida porque estoy contento, y aunque quisiera detenerme e investigar lo que le sucede, sólo se que estoy a que a punto de salir, y me llama a sentarme para conversar, "yo se", me dice, "que no quiero lastimar a nadie y sin embargo lo hago, pero no me importa, he perdido la razón, perdí la razón por aquella chica alta, rizada y pelirroja, que me enseñó mucha mediocridad y hoy después de recuperado y con varios enamoramientos simultáneos, básicos, sensuales, simultáneos, distintos, creo que he podido cerrar todos y cada uno"... que difícil, el monstruo ama, sufre, odia, se reconcilia y está enamorado todo a la vez, se trata de reconocer en que momento estas, en que vez se encuentra, muchas veces, todas las veces, al mismo tiempo, es un efecto de la adicción tan profunda que tiene la bestia, si no es un cóctel de emociones, es imposible que las sienta, si no es al mismo tiempo con un par de gente, la bestia no siente nada, no es compasiva, no siente amor, que difícil para mi ver así a la bestia, cuando hemos superado tanto, al final ese ser casi humano, no puede dejar de crear, pero en esa manera en la que se reinventa, sabe que es, bueno quién es. " yo puedo oírte", le digo " sin embargo está adicción a emocionarte, ya no es de mi control, bestia, no es posible que sabiendo que tu hechizo es eterno ahora, no puedas reinventarte, vamos, ahí está la solución, si ya no sientes nada, dedícate a otra cosa, tu forma humana..." Y mientras yo hablo, lo veo mirarse las manos, los rasgos de lo que fue un ser humano ahí quedan, mira sus ojos a través de la coraza que le cubre el rostro, y supongo que vuelven la am mañanas semi frías, la luz del sol sobre la pared gris claro, el olor a café, los stropwaffels ablandados con el vapor caliente, sus uñas claras haciendo llegar el vaso, la desnudez errante, el chillido de la puerta, el perro con nombre de licor de hierbas babeando el ambiente...dormir al ras del suelo.
"Voy a componer una canción", le aviso, mientras sigue absorto frente al librero, no me contesta, hace mucho que su lenguaje no es el de un humano, pero esa conexión que tenemos me hace entender que algo, alguien, un pequeño sentimiento lo une a este mundo todavía, es lo que me hace pensar que dentro de la bestia hay algo humano, que no ha sido dominado por el instinto. Yo represento soy el arte, la civilización, el intelecto, la frialdad, el conocimiento de los números, el es el instinto, la sensación, el amor, el odio, orgánico en todo sentido. No se como traer a la bestia de vuelta, sin embargo como dije hay algo ahí que lo sigue manteniendo entre nosotros.
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