domingo, 1 de mayo de 2011

Días extraños... Capítulo IV

“Hace días que busco el camino mas corto a tu ombligo, ¿Qué tengo que hacer para que duermas, bien, tranquila, perdida en mi almohada, conmigo?. No se puede amiga mía, porque no esta en ti, lo has visto y sentido; está en esa membrana donde se juntan el caminar y lo profano también; hay mucho mas ahí, no sé, vivo buscando ese apéndice, esa parte tuya que, sola, vive y se chisporrotea; ha sido mía en repetidas ocasiones y no la tengo, va de mujer en mujer buscando un lugar entre la espina dorsal y las caderas, en fin, existe, digámoslo así."

No hay comentarios:

Publicar un comentario