¿Por que late el corazón?, me preguntaste, y te recuestas en mi pecho a oír lo que te digo.
Amo tanto tu cabello y como me escuchas cuando hablo, y cuando te cuento historias que comienzan así:
"Hace muchos años, las personas no tenían el aspecto que tienen ahora, y tampoco morían como lo hacemos hoy en día. Las personas eran algo parecidos a la madera, tenían colores menos vivos, y se movían de forma chistosa y rígida, porque tenían poco movimiento en los codos las rodillas y las caderas, se saludaban chistoso y no tenían que peinarse, porque el cabello era más bien musgo; al morir las personas se iban desmenuzando, como la madera podrida, se deshacían. se caían a pedazos hasta que desaparecían, era un mundo distinto al que conocemos.
Mientras, en este mundo distinto al nuestro, se empezaban a inventar las cosas, un hombre, estaba tratando de contar el tiempo; empezó contando de manera mental, pero se encontró que cuando comía, o dormía dejaba de contar, y al reiniciar con la cuenta, no sabía exactamente cuánto tiempo había pasado y en que número tenía que seguir contando, entonces pensó que debía construir un tipo de mecanismo que contara sin interrupción. Probó con madera, con hierbas, con un par de ardillas que contaban, pero no pudo encontrar como resolver este dilema. Luego buscando en el bosque, encontró una raíz extraña; era algo parecido a una mandrágora, como un bulbo en la tierra. Así que se puso a hacer figuras con ella, labró algo, un dibujo en ella, y se dio cuenta de que lo que había creado podía llevar un ritmo, algo así como un "beat", y pensó que tal vez tenía otra utilidad, y como su esposa había empezado a envejecer, orado un agujero su pecho y puso el aparato dentro. Al cabo de los días notó que el aparato se hizo uno con su esposa, no solo se incrustó en el pecho sino que empezó a funcionar con el resto del cuerpo. Luego notó que las extremidades de su esposa eran un poco mas elásticas, y su piel tenia un pálido rosa, un aspecto más fresco, su cabello era risado, y sonreía hermoso, con una mirada cálida que hacía que aquel hombre pensara en cosas lindas también.
La demás gente notó el cambio y comenzó a encargar estos aparatos a aquel hombre, todos comenzaron a morir diferente, pero también a moverse y a ser diferentes, todo estaba cambiando a como lo conocemos hoy; pronto comenzó a vender muchos con diferentes tonos y grabados en estilos que él y su esposa soñaban por las noches y con los cuales decoraban cada uno de esos aparatos, que llamaron corazónes. Luego ella se quitaba los zapatos y se sentaban a tomar té y a comer juntos, el tomaba de su plato y ella le regalaba de su arroz con pollo, el le limpiaba las mejillas y la veía como un niño a su primer árbol de navidad, ella recargaba su cabeza en el hombro de él, se tomaban de la mano y veían el atardecer todos los días..." y esa es la historia que te conté, ah ¿Por que late el corazón?, el mío late por momentos como este, donde estas tú y puedo verte a los ojos, y decirte que pase lo que pase, esta vez voy a estar aquí para ti.
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